Crónica de lo que dijo y no dijo Uribe

RETRATO DE UN DICTADORZUELO VEREDAL

BBC © MMIX


Sólo unas horas antes había tenido audiencia con el Papa Benedicto XVI. Y el presidente de Colombia, Álvaro Uribe, no escondió su emoción.

"Yo me veía allí en ese escritorio, enfrente del Santo Padre, y me conmovía mucho, saber yo que en el escritorio de un madero viejo, bien mantenido, tenía enfrente a Su Santidad, que quien me estaba hablando es Su Santidad. Aquel a quien yo le estaba dirigiendo unas palabras es el Santo Padre, pues usted imaginará qué conmovedor es eso".

Pero un par de minutos después su tonó cambió: "No interprete mal al gobierno colombiano. El gobierno colombiano es muy prudente. Por eso no me gusta este tipo de entrevistas; porque ustedes entran a hacer unas preguntas que no corresponden a la realidad. Simplemente creando confusiones".

BBC Mundo le había preguntado si extrañaba la relación especial que tenía con el expresidente de Estados Unidos George W Bush, ya que el nuevo mandatario de ese país, Barack Obama, pertenece al partido demócrata, el que ha frenado la aprobación en el Congreso de Estados Unidos de un Tratado de Libre Comercio firmado por ambos presidentes a comienzos de 2006.

"Chismes"

"Esas preguntas son chismes de cafetería", dijo Uribe más tarde, cuando BBC Mundo le preguntó si creía que el foco de la relación de Estados Unidos con América Latina, bajo el gobierno de Barack Obama, estaría más en México y Brasil y no tanto en Colombia, como sucedió con el gobierno de Bush.

El presidente colombiano dijo que la relación de los dos países era una vieja alianza y que trasciende a los individuos y los partidos.

También, se mostró confiado en que la colaboración con Washington en términos de la lucha contra el narcotráfico continuará e insistió en que la aprobación del TLC "sería buena para los dos países".

"Es incomprensible que una alianza de tantos años alrededor de principios democráticos, de la lucha contra el narcotráfico, no tenga estos desarrollos", explicó Uribe.

Había más preguntas, y una en especial que no podía quedar por fuera del cuestionario:

¿Usted quiere ser presidente de Colombia cuatro años más?

(Hágame) Otra pregunta, amigo... ¿Usted dónde nació?

Yo soy argentino.

Bueno, estudie la historia de su país, deje la democracia colombiana tranquilita.

BBC Mundo insistió (ver video) -argumentando que era una pregunta válida, ya que está en marcha en Colombia un proceso para aprobar un llamado a referendo que permitiría reformar la Constitución y permitir su reelección- y Uribe dijo que él prefiere "entenderse con la opinión pública".

Luego, explicó que su "campaña" es "prolongar en el tiempo" la seguridad democrática, la confianza inversionista y la cohesión social -tres conceptos que él ha definido como los baluartes de su gobierno-, sin decir si esa continuidad lo involucra a él como presidente del país durante cuatro años más.

Cuando BBC Mundo le preguntó si él era optimista respecto de un posible reestablecimiento de las relaciones diplomáticas entre su país y Ecuador, Uribe ofreció "una opinión de afecto al pueblo ecuatoriano".

"Pero, ¿cree que esas relaciones podrían ser reestablecidas en un futuro cercano", le repitió BBC Mundo.

"Una opinión de afecto al pueblo ecuatoriano", repitió Uribe, y aclaró que su gobierno tiene un "concepto de relaciones internacionales sin aspavientos, sin declaraciones explosivas, con prudencia y dedicación en todas las horas".

"Todo el apoyo"

En otro tramo de la entrevista, Uribe hizo una encendida defensa de las Fuerzas Armadas de su país, que han enfrentado a acusaciones de violaciones a los derechos humanos, como los casos de los falsos positivos, en los que el ejército está acusado de vestir a cadáveres de civiles ejecutados extrajudicialmente con uniformes de la guerrilla en su afán por mostrar resultados en la lucha contra los grupos armados ilegales.

"Nosotros apoyamos a nuestras Fuerzas Armadas; les damos todo el apoyo", dijo Uribe.

"Y así como apoyamos a las fuerzas armadas, cuando alguien de las fuerzas armadas viola los derechos humanos, el gobierno es el primero en sancionarlo", agregó.

Y prosiguió: "A este gobierno no le tiembla la mano para sancionar a los individuos que quieren dar mal nombre a las fuerzas armadas violando los derechos humanos. Pero este gobierno también denuncia lo siguiente: mucha gente que quiere proteger a la guerrilla, en cada ocasión que hay una acción de las fuerzas armadas contra la guerrilla, esas personas se quejan y dicen que no fue una acción legitima, sino una acción violatoria de derechos humanos".

La entrevista no terminó ahí. Después, el mandatario aceptó con cordialidad hacer otra entrevista en la que podía hacerle "todas las preguntas" que quisiera. Pero en esa entrevista que fue en inglés y se transmitió el lunes por BBC World News tampoco quiso decir si quiere ser presidente de Colombia por tercera vez consecutiva.